Los navegantes del sur de Florida están enamorados de las Bahamas por sus increíbles aguas y su proximidad a los Estados Unidos. Harbour Island está ubicada a 222 millas de la costa de Florida, tomará entre 7 y 10 horas dependiendo de la velocidad de crucero del barco. Dependiendo de la capacidad de combustible de su embarcación, es posible que deba cargar nuevamente antes de llegar a Harbour Island.
La mayoría de los navegantes que viajan por las Bahamas navegan primero a Bimini, ubicado a 50 millas de la costa de Florida. Los navegantes deberán cruzar la famosa Corriente del Golfo para llegar a Bimini. La Corriente del Golfo puede ser un poco difícil de navegar, así que asegúrese de tomar en cuenta el clima y ser cauteloso. Mantenerse alerta y adelantado al clima es crucial para evitar cualquier problema.
Pasarán la aduana en Bimini si es su primer puerto de entrada, y si necesitan cargar nuevamente combustible o si se dirigen hacia otra isla. Se recomienda tener listos todos los trámites de aduana e inmigración antes de ir a la oficina de aduanas. Su barco debe colocar las banderas correctas, amarilla y bahameña también.
El capitán debe tener anteojos polarizados y estar en condiciones de leer muy bien el agua de las Bahamas, su GPS debe actualizarse con la información más reciente y ser el adecuado para usar en el agua de las Bahamas. La mejor marca sin duda es Garmin, en caso de duda el capitán debe investigar al respecto. Se recomienda también tener un GPS de respaldo. La mayoría de los navegantes también pasarán por Nassau, algunos pasarán la noche allí. Harbour Island está a un par de horas de Nassau.
La parte más delicada del viaje es que después de pasar los pozos españoles, deberá navegar a través de la columna vertebral del Diablo, que está salpicada de arrecifes poco profundos. Asegúrese de pasar Devil’s Backbone durante el día con los ojos bien abiertos. La mayoría de los seguros no cubrirán su embarcación si no contrata a un piloto para que lo guíe. Una vez que llegue a la bahía de Harbour Island, esté atento y quédese entre el canal; un momento de falta de atención y aterrizará en aguas muy poco profundas.