Como ciudadano no bahameño, hay algunas cosas que debe tener en cuenta cuando se trata de comprar una casa en las Bahamas:
1- Restricciones a la propiedad: los ciudadanos no bahameños están sujetos a restricciones a la propiedad de bienes inmuebles en las Bahamas. Específicamente, a los no bahameños no se les permite poseer más de cinco acres de tierra o más del 50% de las acciones en una empresa bahameña que posee tierras. Además, los no bahameños deben obtener la aprobación del gobierno antes de comprar bienes raíces en ciertas áreas, como en las islas periféricas.
2- Financiamiento: los ciudadanos no bahameños pueden tener más dificultades para obtener financiamiento para una casa en las Bahamas, ya que muchos bancos bahameños no ofrecen hipotecas a los no residentes. Puede ser necesario obtener financiamiento de un banco en su país de origen o pagar en efectivo por la propiedad.
3- Asistencia legal: es importante trabajar con un abogado local al comprar una propiedad en las Bahamas. Un abogado local puede ayudarlo a navegar los requisitos legales y garantizar que la transacción se maneje correctamente.
4- Impuestos a la propiedad: los ciudadanos no bahameños están sujetos a impuestos a la propiedad sobre bienes inmuebles en las Bahamas. La tasa impositiva se basa en el valor catastral de la propiedad y puede variar según la ubicación.
5- Requisitos de residencia: si planea vivir en las Bahamas durante un período prolongado, es posible que deba obtener un permiso de residencia. Los requisitos para obtener un permiso de residencia pueden variar según el tipo de permiso que esté solicitando y sus circunstancias específicas.
En general, comprar una casa en las Bahamas como ciudadano no bahameño puede ser un poco más complicado que comprar una casa en su país de origen. Sin embargo, con la asistencia legal y financiera adecuada, es posible navegar el proceso y disfrutar de ser dueño de un pedazo de paraíso en las Bahamas.